WASHINGTON (CNS) -- El presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB) condenó el ataque del 24 de noviembre de una mezquita en la región de Sinaí del Norte en Egipto, calificándolo como "un monstruoso ataque terrorista contra personas inocentes en oración".

"Actos terroristas nunca pueden justificarse en nombre de Dios o cualquier ideología política, y el hecho de que este ataque tuvo lugar en una mezquita, un lugar de culto, es especialmente ofensivo para Dios", dijo el cardenal Daniel N. DiNardo de Galveston-Houston.

La agencia de noticias Reuters informó que militantes mataron a más de 300 personas en una mezquita al detonar una bomba y disparar contra fieles. Al menos otras 120 personas resultaron heridas en uno de los peores ataques de la historia moderna de Egipto.

"La Iglesia Católica en los Estados Unidos está de luto con el pueblo de Egipto en este momento de tragedia, y les asegura nuestra solidaridad en oración", dijo el cardenal DiNardo en un comunicado.

"Nos unimos a todas las personas de buena voluntad en la oración para que estos actos de terror y asesinatos, estos actos de grave maldad, terminen y sean reemplazados por un respeto genuino y mutuo por la dignidad de cada persona", dijo.

El ataque ocurrió en la mezquita Al Rawdah en Bir al-Abd, al oeste de El Arish, la ciudad principal en el norte del Sinaí. La agencia Reuters informó que testigos dijeron que "los fieles estaban terminando las oraciones del viernes en la mezquita cuando estalló una bomba ... Unos 40 hombres armados en jeeps abrieron fuego desde diferentes direcciones mientras la gente intentaba escapar".

En un discurso televisado, el presidente egipcio Abdel-Fattah el-Sissi dijo que el ataque fue "un intento de detenernos de nuestros esfuerzos en la lucha contra el terrorismo, para destruir nuestros esfuerzos para detener el terrible plan criminal que pretende destruir lo que queda de nuestra región ".