Tomarse el tiempo para celebrar el matrimonio

February 10, 2025 at 3:11 p.m.

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¿Está usted o alguien que conoce casado? ¿Está buscando formas de celebrar su matrimonio en un día que no sea su aniversario? No se preocupe, esto no es una prueba sorpresa. Cada año la Iglesia celebra la Semana Mundial del Matrimonio, y el segundo domingo de febrero es el Domingo Mundial del Matrimonio. Esta es una oportunidad para que reflexionemos y celebremos esta hermosa vocación y Sacramento. Como hombre casado al que le encanta estar casado (es la mejor vida que he vivido) y como director asociado de el Ministerio de Matrimonio y de NFP (Planificacion Natural de Familias)  estoy compartiendo algunas ideas sobre cómo hacer precisamente eso.

¿Pasaste horas escogiendo minuciosamente las mejores fotografías y el diseño para un álbum de bodas? ¿Cuándo fue la última vez que miraste tu álbum de bodas? ¿Les has mostrado el álbum a tus hijos? Se dedicó tiempo y esfuerzo a capturar los "mejores momentos" de uno de los días más felices de su vida. Esta semana, revise el álbum y comparta sobre el día.

Reflexiona sobre por qué quisiste casarte y qué ha significado para ti tu matrimonio. ¿Cómo pensaste que sería el matrimonio? Comparte lo que recuerdas del día. ¿Qué estabas esperando? Si pudieras revivir un momento del día, ¿qué te gustaría volver a experimentar?

¡Recrea tu recepción (a pequeña escala)! Disfruta de una comida elegante y vístete elegante. Si tienes hijos, invítalos a brindar. Podría ser divertido escuchar de ustedes dos lo que han observado sobre el matrimonio. Comparte tu “primer baile”. ¿Qué te viene a la mente al escuchar de nuevo tu canción de “primer baile”?

Haga que un profesional limpie sus anillos y vuelva a intercambiarlos diciendo: "Recibe este anillo como señal de mi amor y fidelidad en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo". Los anillos son una señal para ti y para el mundo de tu vocación.

Sin embargo, la mejor manera de conmemorar este día es a través de la oración. Ora por aquellos que estuvieron presentes en tu boda, especialmente aquellos que desde entonces pasaron a la vida eterna. Y pide a los que ahora están en el cielo, que oren por ti y tu matrimonio. Si recuerdas las Lecturas proclamadas en tu boda, léelas y si es posible, asiste a Misa en la parroquia donde te casaste.

Si tiene hijos, tal vez invítelos a proclamar las lecturas y luego tenga una discusión sobre lo que el texto significa para ellos. Si no recuerdas tus lecturas, reflexiona sobre una de las muchas opciones disponibles en línea. Cualquiera de las Lecturas nupciales es terreno fértil para la Lectio Divina.

Recite sus votos matrimoniales. Si la última vez que los dijiste fue el día de tu boda, probablemente no estés solo, ¡pero con suerte no fue esa la última vez que pensaste en ellos! ¿Cómo has visto tus votos vividos en tu vida? ¿Cuánto más significativos se han vuelto ahora que tienen una vida juntos que recordar? Conociéndose más íntimamente, ¿cómo pueden sus votos inspirar su futuro? Reflexiona sobre cómo tu matrimonio hace conocer el amor de Dios en el mundo. Discuta cómo pueden crecer en esta área y cómo les gustaría crecer como pareja. ¿A qué quieres invitar al Señor en tu matrimonio.

Finalmente, oren juntos. Oren con y por los demás. E invita al Señor a bendecir a tu cónyuge.

Nick Petrillo es director asociado diocesano de Ministerios de Matrimonio y Planificación Familiar Natural.