Gustavo Soc estaba cansado en la mañana del Viernes Santo, 7 de abril, no dejó que se mostrara. Como se ve en el Facebook Live de la parroquia, Soc y otros feligreses de la parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles, Trenton, se reunieron felizmente en la Iglesia de la Inmaculada Concepción a las 4:30 a.m. y se pusieron a trabajar en el montaje de las coloridas "alfombras" de aserrín que yacían en la base de las Estaciones de la Cruz, ubicadas alrededor de los terrenos de la iglesia de Chestnut Avenue.

Es posible que las primeras horas de la mañana no hayan sido tan desafiantes si no hubieran estado en la iglesia solo unas horas antes, colocando la alfombra grande en el piso frente al altar después de la Misa de la Cena del Señor el Jueves Santo. Después de una breve siesta de dos horas, regresaron a su parroquia y se pusieron a trabajar ensamblando las paletas de madera y cubriéndolas con aserrín de colores utilizando plantillas de diseño intrincado y su propia imaginación.

Como cada alfombra está cuidadosamente hecha de trocitos de madera y otros elementos como arroz y flores secas, un voluntario rocía rutinariamente las creaciones con agua, manteniendo los trocitos de madera húmedas para que no se vuelen.

Las alfombras están destinadas a ser diseñadas y vistas el mismo día, y aunque había mucho que hacer esa madrugada, gran parte del trabajo ya se había completado.

"Pensamos en los diseños e hicimos los esténciles hace un par de meses. Pero fue bueno ver a la gente agregar más a los esténciles. Fue bueno verlos involucrarse y hacerlo suyo", dijo Soc.

Una Tradición Preciado

Las alfombras son una tradición traída a la parroquia desde el país de Guatemala, el hogar nativo de muchos de los feligreses. También tradiciones que se encuentran en México y otros países centroamericanos, las alfombras en Guatemala son conocidas por sus colores vibrantes y son un destino turístico en todos los pueblos y ciudades durante la Semana Santa, así como la Fiesta del Corpus Christi. La tradición se originó en España y fue traída a Guatemala hace más de 500 años cuando los españoles conquistaron a la gente de Centro América.

Originalmente, las alfombras fueron creadas para explicar historias bíblicas a aquellos que no podían leer. La colocación de las alfombras también imitaba el acto de colocar y crear una "alfombra" de hojas de palma sobre las que Jesús cabalgó cuando fue recibido en Jerusalén el Domingo de Ramos.

"Nuestros abuelos y nuestros antepasados en Guatemala usaban virutas de pino liso. Decoramos con colores", compartió Freddy de León.

Ahora, las muestras coloridas pueden representar una ilustración o símbolo de la pasión de Cristo u otras imágenes que tienen importancia para la comunidad de fe.

"No queríamos perder la tradición. Hicimos esto para traer un poco de nuestra ‘Casa’ a la gente", compartió Juan Maldonado.

Para mantener esta parte de su herencia guatemalteca, la parroquia trajo la creación de las alfombras hace tres años a la parroquia del condado de Mercer y la tradición ha seguido creciendo, comenzando con unos cuantos hombres el primer año para incluir a unos 80 hombres, mujeres y niños que llegaron antes del amanecer para crear las coloridas alfombras este año.

Labor de Amor

Guadalupe Marín, asistente administrativa de la parroquia, explicó que el aserrín utilizado para hacer los coloridos diseños fue lo que quedó después de la creación de una cama que se utiliza para llevar una estatua del cuerpo de Jesús en una procesión el Viernes Santo por la noche.

"Se puede ver que hay símbolos de la crucifixión allí, la lanza, la corona, los clavos y el martillo", explicó, señalando los intrincados detalles de la carpintería.

Las virutas de madera sobrantes se tiñen y están listas para ser utilizadas para las alfombras. El proceso desde el inicio hasta su finalización el Viernes Santo por la mañana puede llevar casi dos meses.

La obra no pasa desapercibida para la comunidad parroquial.  Cientos de personas participaron en las Estaciones de la Cruz el Viernes Santo y admiraron y tomaron fotos de las alfombras en la conclusión.

"A la parroquia le encanta", dijo Marin. "Realmente les recuerda a su casa y familia en Guatemala".

"Esto es mucho trabajo. Pero esto no es nada comparado con lo que Jesús hizo por nosotros el Viernes Santo. Se trata de Jesús y nuestra fe y de transmitir nuestra fe a nuestros hijos", dijo William Gramajo.

Héctor Macario estuvo de acuerdo. "Esta es una forma en que podemos dar gratitud y recordar a todas las personas que hemos perdido.  Macario también reconoció el apoyo brindado a los feligreses por su párroco, el padre Carlos Aguirre.

"Nos permite compartir nuestra cultura y hacer todo esto. Lo hacemos para dar gracias. Damos gracias a Dios por todo, damos gracias a Dios por Jesús. Dedicamos y hacemos todo esto por Jesús".