CIUDAD DEL VATICANO (CNS) -- Ser cristiano no se trata solamente de no hacer el mal, sino que es un ejercicio diario de amar a los demás a través de obras y acciones buenas, dijo el papa Francisco.

Los cristianos pueden muchas veces ser tentados a "creerse santos" y justificarse diciendo"yo no hago mal a nadie", le dijo el papa a miles de adultos jóvenes italianos el 12 de agosto.

"Cuántas personas no hacen el mal pero ni siquiera hacen el bien y sus vidas transcurren en la indiferencia, en la apatía, en el desinterés. Esta actitud es contraria al Evangelio y es contraria también al índole de ustedes jóvenes, que por naturaleza son dinámicos, apasionados y valientes", el dijo.

Según el Vaticano, unas 90,000 personas estaban en la Plaza de San Pedro para el discurso del papa y la oración del Ángelus después de una Misa al aire libre celebrada por el cardenal Gualtiero Bassetti de Perugia-Citta della Pieve, presidente de la conferencia episcopal italiana.

Los peregrinos llenaron la plaza y la calle principal que lleva a la Plaza de San Pedro, aguantando la temperatura ardiente del verano de Roma.

Después de la Misa el papa llegó en su papamóvil y saludó a la multitud, a veces capturando artículos que los jóvenes tiraban hacia el vehículo en movimiento o deteniéndose para bendecir a bebés y niños pequeños.

La peregrinación italiana, que incluyó una reunión en Roma con el papa el 11 de agosto, fue parte de la preparación de la iglesia italiana para el Sínodo de los Obispos en octubre sobre los jóvenes y el discernimiento vocacional.

En su charla antes de recitar el Ángelus, el papa le recordó a los jóvenes vivir sus vidas "de manera coherente" renunciando al mal y haciendo el bien.

"Renunciar al mal significa decir 'no' a las tentaciones, al pecado, a Satanás", dijo el papa. "De modo concreto significa decir 'no' a una cultura de la muerte que se manifiesta en la fuga de la realidad hacia una felicidad falsa que se expresa en la mentira, en el engaño, en la injusticia, en el desprecio del otro".

El papa Francisco invitó a los jóvenes a repetir las palabras de san Alberto Hurtado como recordatorio de su llamado bautismal a la acción: "Es bueno no hacer el mal, pero es malo no hacer el bien".

Él también los instó a ser "protagonistas del bien" y no estar satisfechos con simplemente no hacer cosas malas".

"No es suficiente no odiar, es necesario perdonar; no es suficiente no guardar rencor, debemos orar por los enemigos; no es suficiente no ser causa de división, debemos traer paz donde no existe; no es suficiente no hablar mal de los demás, debemos interrumpir cuando oímos hablar mal a alguien", dijo el papa.