Para Evangelizar a los Jóvenes que Se Han Alejado de la Iglesia, Vayan 'Donde Ellos Estén'
July 29, 2019 at 12:37 p.m.

OMAHA, Nebraska (CNS) -- Todd Christensen no puede decir exactamente cuándo comenzó a alejarse de la Iglesia Católica.
Cuando Christensen, de 27 años de edad, se criaba, él asistía a Misa con su familia y a las clases de educación religiosa en la parroquia St. Leo the Great en Omaha.
Pero, igual que tantos adultos jóvenes católicos, eso cambió después de la escuela secundaria cuando Christensen se trasladó a Lincoln para la universidad. La Misa se convirtió en una idea secundaria y pronto él estaba asistiendo solamente en ocasiones especiales como la Navidad.
Aproximadamente un tercio de los 96.5 millones de católicos bautizados de la nación han abandonado la fe en algún momento de sus vidas, en muchos casos durante la adolescencia y temprano en sus veintes, indican las encuestas.
Y, como Christensen, usualmente no es un suceso trascendental lo que causa una ruptura con la iglesia. Muchos excatólicos dicen que simplemente se apartan lentamente de la fe en vez de citar alguna razón específica para irse, dijo Mark Gray, director de sondeos católicos e investigador asociado en el Centro Para la Investigación Aplicada en el Apostolado, de la universidad Georgetown.
Durante este Año de la Fe, y con el énfasis de la iglesia en una nueva evangelización, hay esfuerzos renovados para evitar la desconexión y traer de regreso a los jóvenes católicos, incluyendo invitaciones personales a la fe, el uso de los sacramentos incluyendo la Reconciliación y programas de educación religiosa que involucran a toda la familia.
La invitación personal de Christensen vino de su madre, quien lo refirió a un psicólogo católico cuando él estaba pasando por una difícil ruptura con su novia. Christensen dijo que al reunirse intermitentemente con el consejero durante aproximadamente un año se dio cuenta que extrañaba su fe.
Ahora él es miembro de St. Vincent de Paul en Omaha y valora practicar su fe y compartir en la comunidad parroquial.
"Tener fe te hace sentir que no estás tan solo y te da un sentido de dirección y propósito", él dijo a The Catholic Voice, periódico de la Arquidiócesis de Omaha.
Aunque varias estrategias pueden invitar a la gente de regreso, ayudar a los jóvenes a desarrollar una relación fuerte con Cristo a través de sus familias y de la comunidad puede ayudar a prevenir caer en la deriva originalmente, dijo Bill Beckman, director de la Oficina de Evangelización y Catequesis de la arquidiócesis.
Desde retiros y concentraciones hasta ministerios juveniles parroquiales y programas y organizaciones de formación en la fe, la arquidiócesis intenta llegar a los jóvenes desde la escuela primaria hasta la universidad y más allá, él dijo.
"Mientras más pronto la gente conoce a Cristo en ese nivel y dice 'sí' desde dentro, más probable es que no dejarán la iglesia", él dijo.
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OMAHA, Nebraska (CNS) -- Todd Christensen no puede decir exactamente cuándo comenzó a alejarse de la Iglesia Católica.
Cuando Christensen, de 27 años de edad, se criaba, él asistía a Misa con su familia y a las clases de educación religiosa en la parroquia St. Leo the Great en Omaha.
Pero, igual que tantos adultos jóvenes católicos, eso cambió después de la escuela secundaria cuando Christensen se trasladó a Lincoln para la universidad. La Misa se convirtió en una idea secundaria y pronto él estaba asistiendo solamente en ocasiones especiales como la Navidad.
Aproximadamente un tercio de los 96.5 millones de católicos bautizados de la nación han abandonado la fe en algún momento de sus vidas, en muchos casos durante la adolescencia y temprano en sus veintes, indican las encuestas.
Y, como Christensen, usualmente no es un suceso trascendental lo que causa una ruptura con la iglesia. Muchos excatólicos dicen que simplemente se apartan lentamente de la fe en vez de citar alguna razón específica para irse, dijo Mark Gray, director de sondeos católicos e investigador asociado en el Centro Para la Investigación Aplicada en el Apostolado, de la universidad Georgetown.
Durante este Año de la Fe, y con el énfasis de la iglesia en una nueva evangelización, hay esfuerzos renovados para evitar la desconexión y traer de regreso a los jóvenes católicos, incluyendo invitaciones personales a la fe, el uso de los sacramentos incluyendo la Reconciliación y programas de educación religiosa que involucran a toda la familia.
La invitación personal de Christensen vino de su madre, quien lo refirió a un psicólogo católico cuando él estaba pasando por una difícil ruptura con su novia. Christensen dijo que al reunirse intermitentemente con el consejero durante aproximadamente un año se dio cuenta que extrañaba su fe.
Ahora él es miembro de St. Vincent de Paul en Omaha y valora practicar su fe y compartir en la comunidad parroquial.
"Tener fe te hace sentir que no estás tan solo y te da un sentido de dirección y propósito", él dijo a The Catholic Voice, periódico de la Arquidiócesis de Omaha.
Aunque varias estrategias pueden invitar a la gente de regreso, ayudar a los jóvenes a desarrollar una relación fuerte con Cristo a través de sus familias y de la comunidad puede ayudar a prevenir caer en la deriva originalmente, dijo Bill Beckman, director de la Oficina de Evangelización y Catequesis de la arquidiócesis.
Desde retiros y concentraciones hasta ministerios juveniles parroquiales y programas y organizaciones de formación en la fe, la arquidiócesis intenta llegar a los jóvenes desde la escuela primaria hasta la universidad y más allá, él dijo.
"Mientras más pronto la gente conoce a Cristo en ese nivel y dice 'sí' desde dentro, más probable es que no dejarán la iglesia", él dijo.
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